Nunca se sabe (ni se sabrá?) qué pasa por la cabecita de los niños, qué cosas suscitan en ellos esas preguntas, los pensamientos, las reflexiones.Y qué les queda dando vueltas cuando uno, intenta darle alguna respuesta.
¿Acaso alguien lo sabe?
"Ma, esto, (la vida) ¿es un sueño o es la realidad?"
“Quiero que tengamos siempre una vida como ahora, no quiero autos que floten en el futuro”
"¿Te duele cuando morís?"
(
Martín-6 años)
Yo te agrego cuando me preguntó:
ResponderBorrar- Tío ¿qué es la realidad?
- Tío ¿cómo se formaron los planetas?
:)
¡Menos mal que tiene un tío que puede contestarle esas preguntas!
ResponderBorrarVero: Esa es una pregunta difícil de contestar. Recuerdo que de chica las respuestas de mis padres eran las únicas posibles. Ellos eran los depositarios de todas las respuestas. Creo que seguramente las respuestas que le des a Martín serán las mejores por el solo hecho de provenir de quien lo ama más que nadie. Con el tiempo el buscará las propias.
ResponderBorrarSon conjeturas y tal vez sin querer evocaciones personales.
Pero si. Los niños son maravillosos y como vos decís pequeños filósfos por tener esa capacidad para el asombro que sabemos es el primer motor de cualquier filosofía.
Besos y perdón por el ladrillo!
Dolores.
Con los ladrillos construimos, no?
ResponderBorrarbesitos!