Algo paso, no se que fue, pero de a poco fui entrando a la sala, y me empece a involucrar más con los bebes... A veces ayudaba a darles de comer, los sostenía, pequeñas actos de "maternaje". Algo pasó en mí. Algo fue apareciendo muy despacito. El nacimiento de mi sobrina también tuvo que ver. El primer bebé en la familia.
Hoy Martín cumple 11 años, y siento que estuvo desde siempre conmigo. Suelo decir que la vida es un antes y un después de la maternidad. Por supuesto que es una elección. Nadie puede condenar a otro por no desear tener hijos. A mi me criticaban mucho, cuando yo decía que no quería tenerlos. Lo sé.
Hoy agradezco al Universo, que se haya producido ese cambio en mi. Tal vez serian miedos, quien lo sabe?
Martín me enseñó a ser mamá, lo hace a diario. Ser mamá me enfrenta a situaciones que muchas veces no se como atajar. Cuando sucedió lo de Kimba, pensaba: cómo se lo digo?, es fácil decir: hay que decir la verdad, son cosas de la vida que va a tener que afrontar, bla , bla... es cierto. Pero como le decís a tu hijo que tiene que empezar a enfrentar sus primeras perdidas...que no va a ver mas a su gatito, que su mejor amigo, que vivía en nuestro mismo edificio, al cual él llama "mi hermano", se muda a otro barrio...
Mi muchacho, que teme perder mi amor, porque ahora tiene que "compartirme" con El, a pesar de que le explico una y mil veces que son amores diferentes...
Mi muchacho cumple 11. Me dice: mamá no me bardees... pero también me pide que lo arrope antes de dormir...
Martín:
Gracias por hacerme mamá.
Te amo.