miércoles, 26 de agosto de 2020

Otros desayunos

Mi alimentación ha cambiado a lo largo del tiempo, pero sobre todo estos últimos años.
Este verano estuvimos en Traslasierra y, como es habitual, hizo muchísimo calor. El desayuno y merienda casi obligados era un buen platazo de frutas. Allá estaba muy cara la fruta, pero nos las ingeniábamos para armarnos nuestro desayuno. También tostada y todo eso, pero siempre fruta refrescante. Bueno, ya quedó como hábito. Además no como fruta como postre después del almuerzo, con lo cual es la manera que tengo de incorporarla para consumirla durante el día. A veces la como entre comidas. Lástima que acá también hay frutas caras y no siempre ricas. ¿Que le pasó a la mandarina? Por favor! No consigo mandarinas ricas, jugosas, dulces. Que alguien me diga dónde hay! Y el kiwi está imposible $$$. Bueno, compro bananas, manzanas, naranjas y alguna frutilla cuando veo ofertas. 





Esta cremita Chocobatata es una receta de Natalia Kiako, es básicamente batata y cacao amargo. Es muy deliciosa. Yo no soy muy fan de lo dulce pero para algún momento de necesidad de dulzor, vale! 


En mis desayunos o meriendas, a veces consumo estos patés vegetales. Este es de zanahorias, ideal para untar pancitos, talitas integrales o pancakes de avena, por ejemplo. También me gusta el hummus, tahini, paté de remolachas, y muchos más!

Otro desayuno rico, es la cremita de avena y manzanas: con avena fermentada (la dejo en remojo el día anterior con un chorro de limón o con vinagre de manzana sin pasteurizar), manzana rallada, canela y miel. Pongo primero la manzana en una cacerolita, la ablando un poco al fuego suave, siempre revolviendo, luego le agrego la avena y algo de líquido (agua o alguna leche vegetal). Siempre revolviendo (no olvidar esto!) hasta que se forme una cremita deliciosa. Se puede endulzar con miel o lo que usen y por supuesto yo la condimento con canela, mi amor eterno. Esta cremita, cuando se enfría, se puede poner en un tupper en la heladera. Es rica tibia como también fría. 

Entonces, basta de limitar el desayuno a la aburrida tostada con manteca (o queso) y mermelada. Incorporemos otros alimentos ricos y saludables. Anímense a realizar sus propias combinaciones. Dulce, salado, todo vale!

miércoles, 12 de agosto de 2020

Bellas estrellas

Los que me conocen saben que cuando un plegado me gusta mucho lo repito varias veces. En este caso, también y he comprobado algo que parece obvio : más la pliego y mejor me sale. No es difícil, es muy sencilla, sólo paciencia y saber que la práctica hace al maestro. Pensaba que quedaría linda hacer una corona de varias de éstas para Navidad. Les dejo varias fotitos y el link  con el video, por supuesto, así la pliegan! El diseño pertenece a Niceno.









martes, 11 de agosto de 2020

Fanzines- Mini libros

Una de las cosas que nos regaló estos tiempos de pandemia tiene que ver con todo lo que podemos aprender de modo virtual. Soy una exhaustiva ciber exploradora y así como hay mucha tontería también encuentro joyitas.

En el Malba están ofreciendo charlas y talleres, me enganché en el taller : Cómo armar un micro libro Origami -Taller de fanzine dictado por Sandra Marin. Ya pasó pero quedó el video en You Tube por si les interesa o en la misma web del Malba, si clickean en el título del taller pueden acceder y verlo completo. Bueno, me entusiasmé con los mini libros y empecé a plegar a lo loco, como suele suceder cuando un plegado me gusta mucho. Además es una idea que puede generar muchas ideas más. Y sirve para lo que la imaginación les dé: se pueden hacer como souvernires, para regalar, se pueden hacer minilibros temáticos, como accesorio para un regalo o como regalo en sí mismo. Yo hice varios: uno de haiku, donde transcribí haikus, otro de bebidas hecho en collage , otro de palabras que me gustan, y así se puede seguir alimentando ideas.

Les dejo algunas fotos y ojalá se entusiasmen y armen sus propios mini libros. También subo algunos marca páginas que estuve haciendo para regalar.







Utilizando viejas texturas

Libritos en su mini biblioteca


¿Libro papel o libro digital?

Hace tiempo que las NT (Nuevas Tecnologías) se han instalado en la vida cotidiana. Siempre concluimos que no son un fin en si mismo, sino un recurso más que, depende cómo se use, se convierte en algo útil y práctico, o en un insumo al cual rendirle culto y esclavizarse. 

Leer hoy en las redes sociales , aún en esta época, planteos de viejas dicotomías libro-papel vs. libro digital, ya resulta anacrónico. La mayoría de los lectores amamos el libro-papel: un objeto hermoso, su papel, sus hojas, la tipografía, la portada, su olor, en fin, es irreemplazable. El soporte digital, por su parte, es útil y práctico, puede contener infinidad de textos (ideal para llevar de viaje), puede subrayarse, se puede leer de noche y no molestar con la luz del velador al que tenés al lado, ya que tiene luz propia. Sin olvidar que los libros digitales son más económicos que los de papel, importante para tener en cuenta en estos tiempos...

Entonces, sabemos que son dos cosas distintas, cada una con sus particularidades, ¿por qué excluir una, demonizándola? Entiendo que se puede preferir una u otra, pero de ahí a establecer una polémica donde los Cultores del libro papel suelen transformarse en una especie de fanáticos que desprecian cualquier otro dispositivo de lectura y a quienes lo usan, es muy diferente. Ambos pueden convivir en paz,  es libre elección, también acorde a las posibilidades económicas de cada uno. 

Finalmente, más allá de gustos y preferencias, si estos tiempos pandémicos no nos enseñaron a ser flexibles y a saber aprovechar los recursos que tenemos a nuestro alcance, no aprendimos nada.