martes, 2 de octubre de 2018

Leche de avena

La avena es un alimento muy versátil en la cocina. Budines, galletas, pancakes, masas de tartas, y también bebidas pueden tener este ingrediente. Mis desayunos cambiaron con la incorporación de la avena. En mi caso, como la leche común no me cae bien, estoy consumiendo esta leche que es más liviana, sana y rica. Jamás creí que iba a poder beberla con el café: queda delicioso 

(Algo tan rico, merecía una linda botella, no?)

La receta es muy simple:
Dejar remojar  en agua 1 taza de avena tradicional (no instantánea) durante 12 horas. 
Tirar el agua de remojo y licuar la taza de avena con 4 tazas de agua (se pueden usar 3 tazas si se desea menos espesa). Colar con colador de malla muy fina o lienzo para leches vegetales.
Yo la saborizo con esencia de vainilla, a veces con canela. Como endulzante se le puede agregar miel, sucralosa, o un par de dátiles (al licuar). Se embotella en un recipiente bien limpio y seco (con tapa). Dura 5 días aprox. en la heladera. Es muy rica, y sirve para preparar diferentes platos tanto dulces como salados. Si se prepara expresamente para hacer alguna comida salada, omitir el endulzante.
Yo la uso para hacer crepes, pancakes, salsa blanca, pudding de avena, pudding de chia. 
 

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